domingo, 15 de abril de 2012

Un paseo por las minas del Himalaya

Datan ya de más de cien millones de años algunos de los yacimientos salinos montañosos que dejó el mar en su retirada. La sal, limpiadora de heridas, base de cualquier alimentación, conservadora de alimentos, potente bebida energética mezclada con agua(suero fisiológico) confiriéndole al cuerpo cloro y sodio necesarios para el equilibrio hídrico,... Nos demuestra una vez mas su maravillosos poder. Entre estas grandes concentraciones de sal marina, hay que destacar la sal del Himalaya, que al situarse a tanta altura sobre el actual nivel del mar, goza del aire más puro que pueda existir, confiriéndole a esas montañas salinas la diferenciación entre muchas otras, volviéndola en realmente especial.
Es realmente una concentración especial puesto que dicho yacimiento se creó en una condiciones de presión muy elevadas, obtenido lugares con una concentración de sal cristalizada de color rojo anaranjado totalmente inusual. Sal cristalina que se extrae conservando su estructura primitiva.